El alcalde viajero se negó a desazolvar el vaso captador, con lo que se hubiera evitado el criminal desperdicio del vital líquido
Luego de más de un año de sequía extrema y una crisis por desabasto de agua en la capital potosina, pero de nada o poco han servido las lluvias, ya que a causa de la falta de infraestructura, Enrique Galindo, el alcalde viajero, ha tirado más de 2 millones de metros cúbicos de agua, mientras cientos de hogares siguen padeciendo porque no tienen acceso al vital líquido.
Por su falta de visión, Enrique Galindo decidió no desazolvar la Presa San José, a pesar de que estuvo seca por más de un año, lo que hubiera podido recuperar su nivel de captación de 7 millones de metros cúbicos, sin embargo, reducido el margen de almacenamiento a 3 millones, ahora deben tirar el agua porque la presa no da para más.
Desde el inicio de la temporada de lluvias ha sido necesario abrir las compuertas de la Presa San José en al menos dos ocasiones, lo que ha provocado un ecocidio y crimen a la humanidad pues se han desperdiciado más de 2 millones de metros cúbicos de agua.
Lo que agrava las malas decisiones del alcalde viajero es que los hogares potosinos siguen sin agua, las familias aún deben destinar varios miles de pesos a la compra de pipas, el gran negocio del INTERAPAS y su director chiquito.